Movimiento Eucarístico Juvenil - 6º Parte - Metodología práctica del MEJ



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A) Encuentros locales y nacionales y campamentos:

Muchos países tienen la tradición de un Encuentro Nacional del MEJ cada año, con amplia participación de sus miembros en todo el país. Estos pueden tener diversos objetivos: el compartir, la formación, vivir un retiro, la celebración. También el MEJ tiene regularmente Campamentos de Verano. Estos encuentro se encuentran matizados de la realidad de cada centro o región, es decir, cantos, símbolos, momentos fuertes y significativos, periodos del año más significativos, etc. Este tipo de encuentros permite vivir y renovar la pertenencia eclesial.


B) Equipos:

La fe compartida en comunidades de niños o jóvenes, con reuniones o encuentros semanales tiene como objetivo fundamental llevar al muchacho al encuentro con Jesucristo y a la vida eclesial. Los grupos MEJ se llaman “equipos” y a los miembros del MEJ, los llamaremos aquí “mejinos”.
Es también en el compartir y vivir en Iglesia donde los muchachos y muchachas descubren al Dios de Jesucristo que actúa en la propia historia personal y comunitaria. En esta dimensión el mejino aprende a recibir de los demás, comunicar de lo suyo, relacionarse y actuar con los demás (expresión en equipo),
estar atento a la vida que lo rodea. Se profundizara en algunos de estos aspectos:

  • Comunicar: se trata del convivir y compartir, o bien, la vivencia del compañerismo y la amistad. De esta manera se descubren las cualidades de cada miembro del equipo y la complementación que se puede dar entre ellos. El mejino se descubre y descubre al otro como alguien diferente y único; y así puede también encontrar su lugar en el grupo y formar equipo, cuerpo, con los demás mejinos. Para ello aprende a expresarse por medio de la palabra: tomando la palabra y dejando a los otros y al Otro expresarse también. Para vivir esto, el Movimiento propone diversos medios, como son: el compartir lo ocurrido en la semana, el debate, el juego, actividades y reflexión con relación a la vida en equipo, la “relectura” (discernimiento espiritual) de los acontecimientos de la vida, el Cuaderno Personal, todo lo cual forma parte del acompañamiento de equipo.
  • Actuar juntos: El compartir con los demás permite abrirse a otras perspectivas y aprender a elegir juntos, considerando otros modos de pensar. Esta elección lleva a tomar posición y a actuar en el equipo de manera más interactiva y no sólo individual, aprendiendo el respeto de los demás. Los medios que ayudan al mejino
    a vivir este punto son: el iniciar a tener un Cuaderno del grupo, actividades manuales para construir juntos, cantar, actividades de expresión, proyectos de equipo, preguntas, debates y discusiones al nivel de los mejinos y el compartir en equipo las experiencias, tanto vividas en los encuentros como fuera. Una
    experiencia fuerte en la cual el mejino se confronta a este actuar con otros son los campamentos, ya sean aquellos de fines de semana o bien, los ofrecidos durante los tiempos de vacaciones que muchas veces pueden ser experiencias de varias semanas. Se aprende allí a conocerse a sí mismo, a vivir y compartir con otros en experiencia de comunidad, a formarse en los valores espirituales y del servicio al mundo.
  • Atención a la vida: La vida del equipo MEJ busca también enseñar a sus miembros a prestar atención a la vida. Esto tiene por objetivos el desarrollo de competencias propias de la vida del equipo, ser actor asumiendo el propio lugar en él, hacerse responsable de esta vida de equipo junto con los demás. Con esta asunción de sus responsabilidades el mejino está llamado a discernir cómo vivir en la verdad. Para ello se ofrece la distribución de responsabilidades, elegidas en función del proyecto de equipo. Se presentarán iniciativas de compromiso, las cuales también se verán como desafíos a afrontar. Se les invitará a compartir sus experiencias, sus puntos de vistas, sus preocupaciones…

Todo esto los debe abrir a una atención a lo que ocurre a su alrededor, a un deseo de comprender lo que sucede en su propio medio ambiente (amistades, grupo), en la familia, la escuela, el barrio, y también en la sociedad y el mundo (cultura, medios de comunicación y ciencias). Propicia a abrirse de manera progresiva a los otros con sus diferencias, aprender a acoger aquello que es nuevo, inesperado. A los mejinos mayores se les propone la experiencia de animación de alguna de las actividades. También se les invita a tener acompañamiento personal, o acompañamiento espiritual.





C) Reunión de equipo MEJ

Los encuentros del MEJ tienen estas características:

  • Periodicidad: semanal
  • Número de participantes por equipo: idealmente no más de 12
  • Duración: no más de una hora y media
  • Modalidad: acompañado por un monitor o animador

Desarrollo de un encuentro de un equipo MEJ:

1. Plantear con claridad objetivo y metas

2. Momentos (* optativos):
  • Iniciar en la presencia de Dios
  • Compartir la vida
  • Reflexionar a la luz de la Palabra y de la Fe
  • Formación *
  • Jugar *
  • Programar un servicio *
  • Evaluar
  • Celebrar


3. Contenido (según tiempos, personas, lugares):

En cada encuentro se tratan temas de la vida puestos en relación con Dios y los demás (afectividad, vida espiritual, compromiso social, uso del dinero, del tiempo libre, familia, sexualidad, vocación, el sufrimiento y muerte, etc.).

El contenido de estos encuentros está al servicio de abrir la persona integral del mejino (su cuerpo, alma, espíritu, visión) a múltiples dimensiones formativas. Uno de los ejes de esta formación es lo que se llama La inteligencia de la fe (otro eje es la oración, desarrollado más abajo).

La reunión del equipo será también ocasión para crecer en un conocimiento tanto vivencial como intelectual y doctrinal de la fe: se debe aprender a conocer la persona de Jesús, la Biblia, la Iglesia, los sacramentos, el Espíritu de Dios que actúa en nuestra historia etc.

La mímica, el canto, los dibujos, estudio bíblico, aprendizaje de oraciones (la oración de ofrenda), vidas de santos, etc., son medios que pueden ayudar a este fin.

Algunos datos prácticos para el modo de trabajar del monitor o animador en la reunión semanal con su grupo:

  • Antes: debe planificar de manera previa, preparar todos los elementos que necesitara para el encuentro y así evitar la improvisación.
  • Durante: debe llegar con anticipación y preparar el lugar de la reunión y así acoger a los que van llegando. Debe hacer todo porque el encuentro se viva en presencia de Dios, facilitando el compartir con los demás (y no que el monitor sea el centro de atención). De él depende el buen desarrollo del encuentro y realiza una evaluación de este mirando si los objetivos iniciales fueron respetados.
  • Después: reflexiona sobre los aspectos que deberán ser mejorados.


D) Etapas de crecimiento
 

El MEJ organiza los equipos de sus integrantes sea por edades, sea en relación a la etapa del desarrollo del mejino, considerando también su madurez evolutiva (sicológica).

En cada una de las etapas deben estar presentes estas cuatro dimensiones (que se irán desarrollando a lo largo del tiempo con diversas técnicas pedagógicas):
  • Acogida: la alegría del encuentro, el juego, la fiesta.
  • Formación: conocimiento del mundo y de Jesús, aprendizaje de la oración y de otro tipo de experiencias para crecer en la fe y como persona.
  • Misión: la vida eucarística y el servicio.
  • Celebración: celebrar la vida con Jesús, la Eucaristía y los sacramentos.

El MEJ no es por toda la vida. Es por la formación de la infancia y la juventud. El Movimiento prepara a servir el mundo dentro la Iglesia. Después, el Apostolado de la Oración, ya como adultos, acompaña el resto de la vida en la misión de cristiano comprometido.

Es importante indicar que el avance de una etapa a otra suele estar señalado con una celebración especial, que marca un paso más en el compromiso del niño o joven con Cristo y con la Iglesia. Los nombres y límites de estas etapas varían de un país a otro. En general, se puede decir, que estas etapas son referidas a tres
“momentos eucarísticos” que apuntan a sus objetivos generales:

  • Los más pequeños: aprenden a recibir la vida ( la vida como un don)
  • Los de edad mediana: aprenden a asumir la vida, a hacerla propia y a buscar caminos (acoger la vida)
  • Los más grandes: aprenden a entregar la vida (la ofrenda)

Estos momentos estarán determinados por la etapa personal de formación del mejino.
En los países de habla hispana (América Latina y España) el MEJ ofrece 6 etapas:

  • Amigos de Jesús (jardines de infancia, hasta 7 años),
  • Esperanza (8 - 9 años),
  • Discípulos (10 - 11 años),
  • Testigos (12 -13 años),
  • Apostólicos (14 -17 años)
  • Jóvenes por el Reino (de 18 años en adelante).
Para los países de lengua francesa (Francia, Canadá – Québec - y ciertos países en África) son 5:

  • Fuego Nuevo (7 - 10 años),
  •  Jóvenes Testigos (10 - 13 años),
  • Testigos Hoy (12 - 15 años),
  • Equipo Esperanza (15 - 18 años)
  • Equipo Apostólico (18 - 21 años)1.
En Italia existen 4 etapas:
  • Grupo Emaús (8 - 10 años),
  • Jóvenes Nuevos (11 - 13 años),
  • Comunidad 14 (14 - 17 años)
  • Pre-testigos (18 - 23 años)2.
En Brasil existen 3 etapas:
  • Grupo Semillas ( 9-12 años),
  • Grupo Gente Nueva(13-15 años),
  • Grupo Fuego Nuevo (16 años en adelante)3.
1 En francés son conocidos como: Feu Nouveau (Fnou), Jeunes Témoins (JT), Témoins Aujourd’hui (TA), Equipe Espérance (ES) y Equipe Apostolique (EA), respectivamente.
2 En italiano son llamados Gruppi Emmaus (GE), Ragazzi Nuovi (RN), Comunità 14 (C 14) y Pretestimoni (pre‐T), respectivamente.

Lo importante, como se dirá más de una vez, es que en estos equipos, grupos o comunidades de vida, el mejino viva y pueda crecer tanto a nivel humano como espiritual, y aprenda a ser fuente de vida para los demás, para la comunidad misma y para la Iglesia.

Se puede también describir esta pedagogía como hacer la “Experiencia de Emaús”. Como lo vivido por los discípulos según Lucas 24, el mejino está invitado a aproximarse a Jesús, con quién hace una relectura o reinterpretación de los hechos, escucha la Escritura, comparte el Pan, es enviado a anunciar la Buena Noticia.

En el MEJ, por medio de estos ejes de acompañamiento y vivencias se permite al niño y adolescente llegar a ser “persona Eucarística”.

E) La Oración en el MEJ

Las características propias de la oración en el MEJ tienen sus raíces en la tradición espiritual del Apostolado de la Oración, del cual forma parte. Quiere educar al mejino a vivir una relación de amistad permanente con el Señor, a encontrar a Dios en todas las cosas. Su oración será siempre una oración que parte de la vida y está unida a la vida, a la vez que anclada en la Palabra de Dios y orientada a convertirlo en apóstol al servicio del mundo en la Iglesia.

Si bien toda la vida del mejino quiere ser respuesta al llamado de Jesús, pedagógicamente se insiste en la vivencia de tres momentos especiales de encuentro con él: Los Tres Momentos del día. En cada uno de ellos se hace un alto para hablar a solas con el gran Amigo.

¿Cuáles son los 3 momentos? 1) El ofrecimiento, 2) el encuentro de amistad, 3) la revisión. En portugués son conocidos como: Grupo Semente, Grupo Gente Nova y Grupo Fogo Novo, respectivamente.

1) Cada mañana una Entrega (Primer Momento)
Al despertar, el Ofrecimiento del día al Señor: es el momento de saludar al Señor y ofrecerle todo el día que será vivido. El mejino ofrece sus oraciones, palabras, obras, sufrimientos, todo lo que le toca hacer ese día, para hacerlo con Él y al estilo de Él. Este ofrecimiento lo puede hacer con sus propias palabras o con alguna oración ya escrita.

2) Cada día un Encuentro (Segundo Momento)
Se trata de un Encuentro de amistad con Jesús en algún otro momento del día, a través de un rato de oración personal, una visita al Santísimo, leer el Evangelio, la bendición de la mesa en casa…, o cualquier otro momento en que se acuerda de él durante el día. Este segundo momento puede ser también el momento de celebrar la Eucaristía y recibir a Jesús en la Comunión. (Se pueden vivir muchos “segundos momentos” durante el día).

3) Cada noche una Revisión (Tercer Momento)
El Examen o Revisión del día, al acostarse, para reconocer el paso de Dios por la propia vida ese día. Más que un Examen de Conciencia, es un examen de toma de conciencia de cómo ha estado Dios con uno mismo y uno mismo con Él en el día que termina. Para este tercer momento se pueden seguir tres pasos: Dar gracias por lo que Dios ha hecho en mí en este día, pedir perdón por la resistencia a la obra de Dios en uno mismo, pedir ayuda para que mañana se viva más unido a Jesús.


¿Cómo vivir cada uno de estos momentos? 

En ellos pueden servir oraciones que han sido escritas por otros, pero se recomienda usar las propias palabras. Siempre ayuda ser muy concreto: ofrecer las actividades que el mejino va a realizar aquél día, compartir con Él lo que se va sintiendo, traer a la memoria las personas con las que se ha estado, etc. Se debe procurar aprovechar más cada Momento en calidad e intensidad que en su larga duración. Se parte de la base que es difícil tener tiempos reposados y largos para orar en medio del ajetreo de cada día, por esto se favorece esta oración de pocos minutos, fuertes y profundos.

Ayudará encontrar un lugar propicio en la propia casa, un “rincón de oración, un lugar especial para vivir este encuentro (con una imagen, una vela, etc.), como también el aprender a adoptar ciertas actitudes corporales que favorezcan la oración.

La oración comunitaria y la participación en la Eucaristía, así como todas sus vivencias con su equipo MEJ, alimentarán la oración personal del mejino.





F) El cuaderno personal

Es una herramienta que ayuda a expresar el encuentro con Dios y con los demás. En él se escriben los diversos procesos personales, que luego se pueden releer y recordar, para aprender de ellos. Será de este modo un reflejo del paso de Dios en la propia vida. Así se dispone a discernir su voluntad. De aquí la importancia que cada integrante del MEJ tenga y use su cuaderno personal, el cual nunca será un simple diario de vida ni tampoco un espacio de sólo «desahogo». Será diferente el uso que le dará un niño o niña que ingresa al MEJ al de un joven que ya lleva un tiempo en el Movimiento, pero para todos será una ayuda valiosa en su vida de mejinos.

El Cuaderno ayudará a que el paso de Dios por la vida de cada integrante se haga paso de Dios por la vida del grupo. Cada joven, a partir de lo vivido con Dios, podrá compartir con sus compañeros lo que registró. El uso del Cuaderno será muestra de la seriedad con que se comparte en el grupo la voluntad de Dios. Sin él se desaprovecha la riqueza del encuentro personal. Por eso es una herramienta indispensable en la metodología.

¿Qué anotar? Cuando se escucha y se sigue a Dios, se perciben sentimientos, movimientos y pensamientos interiores. Si se presta atención, se descubre que detrás de ellos hay un espíritu bueno que invita a seguir el buen camino, y un espíritu malo que aleja de él. Depende de la libertad de cada cual dar cabida a uno
u otro espíritu, elegir el camino de Jesús o el contrario.

Son estas percepciones y reacciones, luchas y elecciones, lo que se anota en el Cuaderno Personal, para ayudar a expresarlas y discernirlas. Es por lo tanto una bitácora o cuaderno de vida espiritual, privado, respetado por todos. Este es el uso principal que se da al Cuaderno. Será un lugar de «memoria» de lo que va pasando; será un espacio para expresar los sentimientos más profundos. Algunos lo utilizarán escribiendo directamente sus oraciones al Señor y otros quizás recogerán los nombres de las personas a través de las cuáles Dios le va hablando. Además, sirve para anotar la vida del equipo, recuerdos, temas de formación u otros momentos significativos de la vida del mejino.

Al monitor, animador o coordinador del MEJ le resultará conveniente tener un cuaderno para anotar las planificaciones de la reunión, diferente de su Cuaderno Personal propio. Este le ayudará en la organización de su servicio semanal sin caer en repeticiones monótonas o improvisaciones arriesgadas. Al consignar en él lo planificado y vivido con los niños y jóvenes, puede corregir los errores y prepararse para un mejor servicio cada día.

Los niños del MEJ usarán el Cuaderno con mayor amplitud, buscando registrar los momentos más importantes de su crecimiento en la fe. Algunos centros poseen también un «Cuaderno del Equipo» o del centro mismo que van completando entre todos. En los casos en que los papás se integran a las actividades de sus hijos, también puede ser utilizado como «Cuaderno Familiar» y reunir las fotografías, recuerdos, dibujos o cartas que reflejan todo aquello que han ido viviendo junto al Señor a lo largo del año.


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Enlaces para temas anteriores:

Movimiento Eucarístico Juvenil - 5º Parte - Pedagogía del MEJ Fundamentos Educativos
Movimiento Eucarístico Juvenil - 4º Parte - Pedagogía del MEJ Fundamentos Espirituales
Movimiento Eucarístico Juvenil - 3º Parte - Espiritualidad del MEJ
Movimiento Eucarístico Juvenil - 2º Parte - El MEJ y el Apostolado de la Oración
Movimiento Eucarístico Juvenil - 1º Parte - Historia

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Agradecemos al P. Antonio González Callizo, S.J. Director Nacional del A.O. por brindarnos esta información.

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