9º Parte
P. Ignacio Garro, S.J.
Última parte dedicada a los Testigos de Jehová
6.- ASPECTOS SOCIOLOGICOS
Se ha dicho que el jehovismo es una "secta proletaria". Hay que tener en cuenta el ambiente donde prolifera, a saber: entre las clases más humildes, económica y culturalmente hablando, pero donde más se desarrollan es, en ambientes urbanos. Así fue en los comienzos y continúa siendo en la actualidad. Es verdad que el jehovismo está expandido por naciones del Primer Mundo especialmente en Estados Unidos donde nació; pero fueron las clases económicas débiles, los negros, los emigrantes de Latinoamérica, los marginados, a quienes, prestaron desde el principio más atención. Es entre los desheredados profundamente religiosos donde mejor se desarrollan y se extienden. Vale la pena hacer notar que este fenómeno explica el porqué en Brasil y México y otros países, las sectas Testigos de Jehová y Pentecostales han tenido un rápido y profundo crecimiento. La explicación puede ser que ante grandes masas desheredadas la expectativa milenaria de que el mundo presente se acaba, pasa pronto, hay que prepararse para la Segunda Venida que ya es inminente, etc. Esto, en gentes sin mayor preparación les crea, en medio de su marginalidad y desamparo, la esperanza de poder salvarse, aun en medio de su desgracia.
Respecto a su nivel cultural el autor Gerard Hébert 52 dice:
"Notemos que el movimiento jehovista prospera sobre todo en los ambientes carentes de instrucción o cuya instrucción está un tanto retrasada. Hace 15 años (1959) en los Estados Unidos, la instrucción de los Testigos de Jehová que sobrepasara a la Escuela Superior (Hihg School) era menor al 1%; el 15% de entre ellos, ni siquiera había terminado su Curso Elemental (Primaria). Tratándose de un país como Estados Unidos, estas cifras son significativas. Pero ¿cómo es la situación ahora? Es difícil saberlo. Sin embargo, es curioso observar que para ingresar en el Centro de estudios de Galaad (USA) de los Testigos de Jehová, no se exige estudios universitarios, ni siquiera los estudios elementales del Colegio. Y no obstante, se trata de una instrucción donde se prepara durante 5 meses a los misioneros de los Testigos de Jehová. La expansión que los Testigos de Jehová han experimentado en los países en vías de desarrollo ¿sugiere la misma reflexión? Los Testigos se complacen en señalar en las grandes reuniones y en sus congresos internacionales la representación de todas las clases sociales. Pero ignoramos totalmente si, en las clases superiores, se trata únicamente de algunos individuos aislados, o si la proporción entre las diversas clases refleja perfectamente la de los países mencionados".
Todo esto lo señalamos no para desprestigiar a los Testigos de Jehová, sino para constatar que la ignorancia religiosa y cultural es uno de los factores impulsores, determinantes de la inserción de las gentes en las filas de la secta. El antídoto, evidentemente, será la preparación religiosa de la gente como medida más eficaz contra el proselitismo jehovista. Hay que reconocer también, que allí donde hay católicos marginados, carentes de instrucción religiosa y cultural, resentidos contra la sociedad, etc., son los elementos mejores para el proselitismo jehovista.
Otra constante que se da en los jehovistas es que se extienden principalmente entre gentes sencillas y de hondo sentir religioso. Cuando se contemplan las masas jehovistas en sus concentraciones o en sus Salones del Reino, se ve en ellos a gentes sencillas, que parecen sinceras en la profesión de su credo religioso, al que sin duda han abrazado por creerlo el camino correcto que les conduce a Dios. En la mayor parte de los casos no se trata de gente dolosa, aprovechada, que especula con sus actitudes evangelizadoras para sacar provecho en el terreno material.
Otra nota característica, desde el punto de vista social, es que los Testigos consiguen prosélitos en aquellos terrenos donde ha habido siembra cristiana y luego ha sido abandonada, esto se da particularmente entre los católicos y los adventistas. Personas que han oído hablar de Cristo, de la redención, aunque todo esto no ha sido muy bien asimilado. Por eso los jehovistas no dedican demasiados esfuerzos a evangelizar en zonas paganas, saben que no obtendrían buenos resultados. Quieren edificar y sembrar allí donde otros han iniciado ya la tarea y han despertado el sentir religioso. Les interesa quemar etapas, tienen prisa, el Reino llega... No suelen entretenerse en los rudimentos de la fe. No trabajan con niños, quieren gentes adultas, van directamente a los grandes temas de la escatología, a hablar de la Segunda Venida del Señor, sin decir claramente quién es Jesús, ni cuándo va a venir concretamente porque ya se han equivocado 3 o 4 veces. Sencillamente dicen que "el Señor va a venir de un momento a otro". "Hay prisa, hay que convertirse, hay que enrolarse en las filas de jehovismo para salvarse, para quedar inscritos en los 144.000 elegidos del Señor".
a.- Actitudes sociales
En general y desde el punto de vista social, los Testigos son generalmente, casi definitivamente, "gentes atípicas". Para ellos está prohibido votar, pues los Gobiernos de las naciones son obra del demonio. No pueden participar de votación sindical pues también es obra del diablo. No prestan servicio militar obligatorio, pues creen que el Ejército es obra del diablo. No portan ningún tipo de insignia ni respetan la bandera nacional pues todo es obra del diablo. El caso es que en el terreno personal y meritorio son excepcionales, llegan a morir antes de faltar a una de sus creencias, así ha ocurrido en los antiguos países del este de Europa donde fueron perseguidos intensamente y murieron antes de abdicar a sus ideas y creencias religiosas.
b.- Inadaptación a la sociedad
Voluntaria y conscientemente tratan de no integrarse en el contexto social que les rodea. Esto, por motivaciones doctrinales. Su teología les lleva a una auténtica "fuga mundi", es decir, huída del mundo, por creer que el mundo es dominio de Satanás. Así los Testigos de Jehová: "herederos de los prejuicios anabaptistas y menonitas, consideran al mundo como posesión del Maligno, empeñado en arrastrar a los buenos a la perdición. Es una materia, creen ellos, en la que "el cristiano organizado", tanto el protestante como el católico, ha errado completamente y nada tiene que enseñarles. Precisamente su mayor pecado (el de los cristianos organizados) consiste en aliarse con los regímenes mundanos para aplastar a los verdaderos siervos de Dios". 53
c.- Otras excentricidades
Hablando de los Testigos de Jehová y su presencia en la sociedad podemos observar su desentendimiento en todo lo que ocurre en el medio ambiente que les rodea. "El altruismo, se convierte para ellos en una virtud desconocida, y su tendencia constante es la de eludir responsabilidades sociales. Este estrechamiento de miras era casi de temor en personas para las que el proselitismo y el fanatismo religioso se han convertido en su norma de vida habitual. No dirigen clínicas ni hospitales, si no es para sus propios fines proselitistas. Difícilmente se les ve ayudando a las gentes en grandes calamidades, terremotos, inundaciones, etc. Al contrario, estas acciones, lo afirman en la "Torre del Vigía", constituyen una pérdida de tiempo, cuando en realidad lo único que debiera preocuparnos es el anuncio inminente se la Segunda Venida del Señor, quien con su llegada barrerá del mundo esas injusticias que ahora le aquejan". 54
d.- Las transfusiones de sangre
En todas las naciones se ha dado el caso de Testigos de Jehová que han preferido la muerte de algún ser querido antes que permitir que se les hiciera una transfusión de sangre en caso de necesidad, como puede ser una operación quirúrgica complicada, etc.
Las razones en que se apoyan pretenden ser bíblicas. En efecto, hay varias prohibiciones del Antiguo Testamento hechas a los judíos para que no se alimenten de sangre, o para que no coman sangre de animal alguno, por ejemplo: Gen 9, 3-4; Lev 3, 17; 17, 10; 17, 13; Deut 12, 23-25. Estas prescripciones fueron dadas según las creencias de aquel momento histórico, y la creencia común era que el alma de todo viviente residía en la sangre y que por lo tanto quedaba reservada la sangre de la víctima (animal) para ofrecérsela al Señor en el Templo, éste era su valor cultual y sacral. Es obvio que se trata de sangre de animales, y hoy día sabemos que el alma no reside en la sangre, sino que ésta es medio o vehículo de alimentación y oxigenación del cuerpo por medio del flujo sanguíneo. Además esta concepción de la sangre y sus prescripciones legales eran de índole alimenticia, no de índole de salud como es la medicina o las intervenciones quirúrgicas. Además hay otro fallo de error y apreciación histórica, pues una cosa es prohibir comer o beber sangre de animales, y otra cosa es la prohibición de usar sangre humana en una transfusión (que no es para comerla ni beberla) sino para salvar una vida. Otra prueba es que hoy día los judíos más observantes admiten con claridad las transfusiones de sangre. Sin embargo los Testigos de Jehová por creerse más cumplidores y estrictos que los demás usan e interpretan mal estas palabras de la Biblia; con esta actitud hacen que pongan en peligro sus vidas cuando en ocasiones graves de pérdida de sangre requieren sangre humana y la rechazan pues dicen que Dios la prohibe. No hay tal prohibición, ellos la interpretan como prohibición, pero la prohibición no existe.
Aducen, también, que esta prohibición la dio el Primer Concilio de Jerusalén donde, a propuesta del Apóstol Santiago (Hech. 15, 2-29), se recomienda a los cristianos abstenerse de los animales estrangulados y de toda sangre; esta prohibición estaba relacionada, evidentemente, para evitar el escándalo de los neo-cristianos provenientes del judaísmo. Esta fue una prohibición circunstancial desde el punto de vista pastoral y por razones de convivencia entre cristianos que procedían del judaísmo y los que provenían de otras religiones paganas, como eran los gentiles. Era por tanto un deber de caridad (para evitar escándalos), y todo esto ahora no tiene razón de ser.
7.- NUESTRA ACTITUD ANTE LOS TESTIGOS DE JEHOVA
Antes esta exposición detallada y amplia que hemos hecho de la secta Testigos de Jehová surge una pregunta ¿Nosotros los católicos qué actitudes debemos tomar? ¿Dialogar con sectarios que no reconocen sino "su Biblia" y su libros de divulgación y propaganda sectaria? ¿Qué diálogo se puede entablar con aquellos que nos denigran, insultan en todo momento y de toda manera?
El diálogo con un Testigo de Jehová es poco menos que imposible, ellos no dialogan, no escuchan, van a lo suyo, menosprecian toda doctrina cristiana y especialmente la doctrina católica. No atienden a ninguna razón, sólo saben repetir lo que les han enseñado. Además, a ellos no les gusta dialogar en foros abiertos, con personas creyentes cualificadas y de buena voluntad. Ellos parten de la premisa de que "todos los demás creyentes" están equivocados y no conocen la verdadera salvación. Sólo los Testigos de Jehová son los elegidos, pertenecen a ese ejército de creyentes de los 144.000 que preparan la Segunda Venida del Señor. Los demás creyentes de las Iglesias Cristianas tienen que dejar sus creencias y pasar a integrar la Sociedad de Testigos de Jehová para que se salven. Con estos criterios y estas premisas no se puede establecer ningún diálogo serio y alturado. Con sus doctrinas simplista y fundamentalistas es imposible establecer un nivel serio acerca de una discusión sobre la Biblia, la divinidad de Jesucristo, sobre la Trinidad de Dios, la Iglesia como sacramento de salvación, los sacramentos, etc. es decir, el diálogo es muy difícil, por no decir totalmente imposible. Y la prueba es que los Testigos de Jehová no pertenecen ni han querido pertenecer al "Consejo Ecuménico de las Iglesias Cristianas", con sede en Suiza, a la que pertenecen más de 146 Iglesias Cristianas, porque no saben dialogar. Huyen del intercambio teológico. No saben confrontar seria y distendidamente su teología con la de los demás cristianos. Los jehovistas tienen serios problemas con las demás sectas protestantes y sobre todo con la Iglesia Católica, La Iglesia Ortodoxa, La Iglesia Luterana, Anglicana, etc. Es decir, no sólo no dialogan con los Católicos, tampoco con ninguna otra Iglesia Cristiana, ahí está su verdadero falla y su miedo a confrontar "su verdad" con la "verdadera verdad del Evangelio, de Cristo y su Iglesia".
Ante esta dificultad ¿qué hacer ante el fenómeno de la secta jehovista?:
1.- Formación de los fieles católicos, a todos los niveles, de la verdadera doctrina de la Iglesia Católica, es decir, formación catequética sólida y actualizada, especialmente de adultos, ya que hemos visto que trabajan directamente con adultos, no con niños.
2.- Formación ecuménica en las Parroquias y Grupos Apostólicos para saber quiénes son nuestros verdaderos hermanos separados y quiénes son los pseudo-creyentes cristianos.
3.- Formación seria bíblica con adultos. Grupos Apostólicos. Formación relacionada con la Cristología - Soteriología, Escatología, Sacramentos. Hacer que los católicos gusten de la Palabra de Dios, en la oración profunda personal y comunitaria y ésto de manera asidua, a la luz de la Palabra de Dios. Hacer partícipes a los laicos del espíritu misionero de la Iglesia Católica.
4.- Preparación y formación seria Litúrgica para penetrar en el misterio de la vida sacramentaria y poder dar razón del porqué de los Sacramentos en la Iglesia Católica.
5.- Convivencia fraternal cristiana, con sencillez y caridad. A los católicos nos falta saber convivir, compartir con los fieles de la Parroquia nuestras vidas, preocupaciones, necesidades, etc. Tal vez, tenemos que reconocer que los jehovistas conviven más y mejor que nosotros. Saber estimar y tener en cuenta a los demás, especialmente a los más necesitados. Sólo conviviendo como lo hacían los primeros cristianos podremos contrarrestar la acción proselitista de los jehovistas.
8.- JUICIO DE CONJUNTO A LA DOCTRINA JEHOVISTA: 55
Para finalizar nuestro trabajo sobre los Testigos de Jehová quisiéramos emitir un juicio crítico sobre esta secta en su totalidad. No queremos pensar mal y menos condenar a ninguno de sus miembros; ese juicio corresponde sólo a Dios; nosotros queremos con toda objetividad y con caridad llegar al fondo de la verdad. Por eso, tras estudiar seriamente esta secta, conociendo sus actitudes, publicaciones, métodos de captación, presentación de sus enseñanzas etc., nos vemos en la obligación de decir que los Testigos de Jehová son en apariencia una organización religiosa. En realidad son algo más que una simple organización religiosa. Los Testigos de Jehová son la organización moderna, que valiéndose de la Biblia y mediante la siembra de un confusionismo religioso sin precedentes, deshace las ideas básicas y fundamentales del Cristianismo. A continuación damos los principales puntos de la "religiosidad" que profesan los Testigos de Jehová:
1.- Ante todo, el punto de perspectiva orientador de su proselitismo, a saber, la inminente destrucción del mundo y el terrible juicio de Dios (del Dios - Jehová que ellos imaginan y han inventado).
2.- Niegan como un absurdo el misterio de la Trinidad.
3.- Niegan que Jesucristo sea verdadero Dios.
4.- La Iglesia Católica no tiene por fundamento a Jesucristo y a los Doce Apóstoles desde hace ya 2000 años. El Papa no es reconocido ni siquiera históricamente como sucesor de Pedro; más aún, para ellos es, el Anti-Cristo. La única congregación religiosa verdadera es la de los Testigos de Jehová, cuya existencia comenzó cuando la fundó Ch. Taze Russell, en 1876.
5.- Los Sacramentos no tienen ningún sentido, no comunican la gracia de Dios. Ellos practican el bautismo de inmersión para significar el ingreso en los Testigos de Jehová.
6.- Niegan la presencia real de Cristo en la Eucaristía. Ellos celebran una eucaristía de pan y vino que reparten una vez al año entre los elegidos más distinguidos el día de Viernes Santo, la eucaristía, para ellos es sólo una memoria histórica.
7.- El sacramento de la penitencia no libra de los pecados. Ellos conciben la penitencia como un castigo impuesto a quien de alguna manera ha dejado de cumplir órdenes de sus superiores.
8.- La Virgen María no es Madre de Dios, ni fue concebida sin pecado original, ni fue asunta al cielo en cuerpo y alma.
9.- El literalismo o fundamentalismo con que leen la Biblia, especialmente el Antiguo Testamento, le hace decir inexactitudes ofensivas como éstas: La Iglesia Católica es idólatra porque venera imágenes de Jesucristo, la Virgen María y los Santos. La Iglesia Católica está contra Dios porque celebra el día de Dios en Domingo y no en sábado.
10.- Son puritanos y elitistas pues sólo ellos se sienten los elegidos, (144.000). El mundo, las naciones, las Iglesias históricas, los organismos internacionales, La ONU, etc., toda institución pública son cosas diabólicas e inaceptables. Sus instituciones y obras sí son buenas, todas las demás son malas, obra del diablo.
Afirman que sólo ellos tienen la verdad de la Revelación para lo cual manejan la Biblia a su antojo, quitando y poniendo citas según su conveniencia. Muchas veces hay un falseamiento claro y notorio del texto sagrado, en otras oportunidades hay una presentación parcial o dirigida de los pasajes bíblicos, que difícilmente escapan al calificativo de falsificación del verdadero significado. Esto ocurre porque tienen como criterio el "principio luterano". "La Biblia" y "sólo la Biblia", es decir, la "libre interpretación" de la Biblia, entendida como yo la interpreto, iluminado por el Espíritu de Dios; pero en verdad, ni siquiera esto se le permite a un jehovista; en los Testigos de Jehová la Biblia (es decir, su Biblia) sólo puede ser leída, entendida, divulgada, etc., por los jefes de la Central de Brooklyn. En los Testigos de Jehová no hay libertad individual para leer e interpretar la Biblia, solamente se lee y se cree en la Biblia que hizo sus comentarios en "Los Estudios de la Biblia" del fundador. Ch. Taze Russell. Fuera de él nadie puede, ni interpretar, ni leer correctamente la Biblia. Como se puede ver los Testigos de Jehová no admiten la mediación de la Iglesia y su Magisterio para leer la Biblia, pero se someten al "Magisterio" y a la mediación de sus jefes para leer y entender la Biblia tal y como ellos se la comunican. Niegan un Magisterio (el auténtico, el de la Iglesia Católica) y aceptan otro magisterio que no tiene ninguna fidelidad ni credibilidad (la de sus jefes de Brooklyn).
Sus tácticas proselitistas y su doctrina son negativas. Quien se acerque a ellos de buena fe, esperando encontrar espíritu evangélico, se encontrará sin espíritu y sin Evangelio; esta secta vive en un materialismo triste y mundano, sólo les interesa, dar a conocer las revistas, libros, biblias que ellos editan. Las cifras de edición y ventas, en esta área, son realmente increíbles. Uno diría que es un verdadero negocio editorialista. El que se haga jehovista aspirando a una cierta libertad en sus ideas religiosas, se encontrará encadenado a unos dogmas tan irreductibles como absurdos. Será esclavo de una Sociedad poderosa, con sede en Brooklyn, (Nueva York), la "Watch Tower Bible and Tract Society". Es decir, son los Testigos de Jehová. Sociedad Editorial que, como dijimos en las páginas 27 y 28, se le calcula unas ganancias anuales del orden de los 200´000.000 de dólares, libres de impuestos. Sociedad editora que enseñará a cada uno de sus adeptos jehovistas a vender libros, folletos y revistas como la única arma para ganar adeptos y a recaudar fondos, para con ellos dominar y engañar las conciencias.
A veces, sus fuentes de financiación en campañas editoriales y de proselitismo están pagadas por la ayuda masónica como se sabe de un caso bien público y notorio en Paris, donde el P. Lavaud, O.P. en su libro "Sectes Modernes", Edit. Aubier, 1954, página 194, copia la carta de un masón, que afirma la ayuda económica de los masones de Francia a campañas de los Testigos de Jehová. Los masones amenazaron al P. Lavaud con recurrir a los Tribunales de Justicia de Francia por calumnia y dolo. Pero se probó la autenticidad de la carta y los masones optaron por la retirada y callarse. El P. Lavaud, O.P. en dicho libro determina muy bien las circunstancias.
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Referencias:
52 Gerard Hébert, "Los Testigos de Jehová. Su historia y su doctrina". Edit. Casa de la Biblia, Madrid. 1974. Pag. 139.
53 Damboriena. Op. cit. Pag. 11.
54 Damboriena, Op. cit. Pag. 12.
55 Tomado de "Testigos de Jehová". Errores y refutaciones", de Mariano Aboin Pinto. Edit. Fe Católica. Madrid. 1975.
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Agradecemos al P. Ignacio Garro, S.J. por su colaboración.
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