SEMINARIO ARQUIDIOCESANO DE AREQUIPA
1. Relatos de la Creación en el Génesis
1.1. El
relato sacerdotal (P) de la Creación:
Gen 1, 1 ‑ 2, 4ª.
El
relato de la creación contiene dos versiones que presentan innegables
diferencias cronológicas. Un relato es sacerdotal (P): Narra el comienzo del
libro del Génesis. Gen 1, 1,s.s. a 2, 4a. Fue redactado ciertamente después del
destierro de Babilonia (538 . 450 a. d. Cristo), cuando los sumos sacerdotes
fueron deportados junto con las personalidades más importantes del pueblo judío
y fue escrito para dar y fortaleza al pueblo desterrado que flaqueaba en la fe
a Yahvé.
La intención del autor sagrado es referir todo a
la creación en el orden artificial del trabajo normal de una semana. Este
esquema semanal quiere decir dos cosas:
- Que Dios creó el mundo conforme a un plan sabio y en el mejor de los órdenes.
- Que esta creación es un proceso temporal e histórico, ya que la semana era para los hebreos un concepto elemental del tiempo. Este relato la creación está destinado de modo absoluto a la instrucción del pueblo hebreo. Todo o que existe en la creación es referido al Dios uno y omnipotente, que siendo increado y existente antes de todo lo creado, llamó a la existencia al cosmos entero, sin fatiga, sólo con su palabra.
En
contraste con las cosmogonías de los pueblos orientales vecinos, la Biblia no
conoce una materia preexistente, increada y eterna, de la que salieron también
los mismos dioses. Aun las criaturas que el mundo gentil venera como dioses
suyos deben su existencia al Dios uno, que por eso es Señor de todo el cosmos y
no, como los dioses gentiles, sólo una parte del mismo.
El mundo no surgió, como en la cosmogonía
babilónica, de una lucha entre elementos primitivos rivales. El hombre es la
corona y el rey de la creación, creado a imagen y semejanza de Dios y, por consiguiente, distinto de todos los seres
vivientes. El género literario que está redactado este capítulo primero es
Litúrgico-Cultual. Llamado también, canto etiológico, o himno de la creación
del universo cosmos. Técnicamente es conocido con el nombre de "Hexamerón".
Este himno litúrgico que se realizaba probablemente en la liturgia del Templo para dar gracias por la bondad, belleza y perfección de la Creación, esta dividido en cinco tiempos: Decreto. Ejecución. Descripción. Alabanza. Sucesión. Veamos más claramente este himno en el siguiente esquema:
"Así fueron concluidos los cielos y la tierra con todo su aparato y
el día séptimo cesó Dios de toda tarea y bendijo el día séptimo y lo
santificó", Gen 1, 32.
Finaliza
el relato con la creación de hombre ‑ mujer, como la obra más perfecta salida
de las manos de Dios y finalmente viene el día del descanso (Sábado).
Se
ha hablado también que los 11 primeros capítulos del Génesis contienen el
género literario mítico. Lo admitimos pero a condición de que se acepte que el
ropaje del lenguaje es mítico, no el contenido, que es teológico e inspirado, y
por lo tanto revelado por Dios como acontecimiento verdadero. Mítico no
significa = falso; mítico, es más bien una forma literaria primitiva de querer
narrar los acontecimientos primeros (cosmogonía), explicar las realidades primeras a la luz de la fe ayudado de la
inspiración divina.
El
ropaje literario sí es mítico, el contenido no es mítico, es real. Dios nos
revela el QUÉ de la revelación; el CÓMO, es secundario. Lo importante
para el semita es que Dios ha creado todo, de la nada, no se pretende decir
científicamente el cómo.
Este
relato sacerdotal de la creación se ha formado en la liturgia del Templo, no ha
sido una mera narración y nada más, sino un himno de glorificación y alabanza a
Dios. Todo el contexto literario, la forma de expresión simétrica, nos ubica en
medio de un ambiente cultual de hondo contenido teológico cantado probablemente
en las grandes asambleas sabáticas. Detrás de este relato se perfila la
justificación sacerdotal del sábado. Puesto que Dios mismo ha celebrado y
prescrito el sábado, también el pueblo de Israel debe de celebrarlo y
respetarlo.
Este
relato veterotestamentario de la creación presenta, un triple aspecto:
- Es un relato de las grandiosas obras del Creador.
- Es un himno de adoración acción de gracias y de alabanza
- Contiene una intención pedagógico ‑ religiosa, llamando la atención de los hombres hacia la observancia y santificación del día Sábado. Se trata de la glorificación de Dios mediante la santificación del sábado
En
conjunto la enseñanza didáctica de estos
primeros capítulos tiene como finalidad
teológica una enseñanza sobre DIOS ‑ CREADOR.
Lo primero que inculca es la idea de que Dios y sólo Dios ha creado
todas las cosas de la nada. No hay otros
principios ni medios de creación. Dios crea todo por medio de su Palabra y con
su Espíritu ha dado vida a todas las cosas. Esta enseñanza teológica nos señala
el monoteísmo absoluto y monolítico de la tradición sacerdotal en contra del
politeísmo babilónico. Con este himno de la creación, el pueblo de la antigua
Alianza quiere adorar y glorificar a su Dios, defendiéndose contra las
concepciones idolátricas y de los mitos
sobre la creación difundidos entre los pueblos en los cuales tuvo que
tener contacto en su agitada historia (egipcios, babilonios, asirios, cananeos,
etc).
Cuando
se ensalza a Dios en el cuarto día de la creación, del sol, la luna y las
estrellas (Gen.1,14), esta afirmación sirve para desenmascarar y anular a las
divinidades astrales adoradas en las religiones babilónicas.
Con
todas estas características literarias de contenido teológico, el sentido
"anti‑mitológico" del relato sacerdotal es definitivo. Igualmente ocurre cuando en Gen l. 24 y
s.s. describe la Creación, de la mano de Dios, de todos los animales, la
respuesta es la misma no existen divinidades zoomórficas ni astrales. Sólo Dios y nadie, más que Dios, ha creado
todo. Así tenemos:
Relato Sacerdotal de la Creación, Gen 1 ‑ 2,4a
- Contra la astrología babilónica: Divinidades Astrales. Gen 1,14‑19
- Contra la zoolatría egipcia: Divinidades Zoomórficas. Gen 1, 20‑25
Después
de haber descrito el estilo de la tradición sacerdotal como un himno litúrgico ‑
religioso con gran contenido teológico pasamos a otro esquema que nos va a
ayudar a comprender mejor la mentalidad semítica sacerdotal.
El
escritor veterotestamentario describe el universo según la concepción
geocéntrica, que considera a la tierra como un disco plano apoyado sobre las
columnas de la tierra y rodeado de las aguas inferiores Gen 1,7. Debajo de la
tierra, están los infiernos, es decir, el reino de los muertos. Sobre la tierra se extiende, el firmamento,
en el cual están fijos, a modo de lámparas, destinados a separar el día de, la
noche Gen 1,14. las dos luminarias del cielo: la mayor, el sol, para presidir
el día; la menor, la luna, para presidir la noche, junto con las estrellas, Gen
1, 16. La obra divina de los seis días está dividida en dos ternas subordinadas:
OBRA DE
SEPARACIÓN
Día 1º. Creación de la luz y separación de las
tinieblas
Día 2º. Separación de las aguas de arriba de las
aguas de abajo
Día 3º. Separación del mar y de la tierra con la
hierba que germina
OBRA DE
ORNATO
Día 4º. Sol, Luna y Estrellas. Universo Cosmos o
Mundo sideral
Día 5º. Creación de aves y peces
Día 6º. Creación de los animales de la tierra.
Culminación de la creación: la criatura humana: varón y mujer, como reyes de
la creación. Creados a su imagen y semejanza
Resumen del relato Sacerdotal
Hay
un orden de descripción de la creación que va de más a menos. Es una obra de
separación de elementos y de ornato de la tierra. Hay un proceso que va del
macrocosmos al microcosmos. El culmen de toda la creación es la Criatura humana
= varón y hembra, creados a su imagen y
semejanza. Hombre y mujer tienen igualdad en dignidad, diferencia de
sexualidad, complementariedad existencial. Y les dio un mandato: "Creced y multiplicaos y dominad todo
lo creado". Dios crea, por medio de su Palabra y con su Espíritu dio
vida a todo lo creado. Y lo creó todo de la nada. Bondad y belleza de la creación: "Y vio Dios que todo era bueno".
...
...
Agradecemos al P. Ignacio Garro S.J. por su colaboración.
No hay comentarios:
Publicar un comentario