P. Mark Link, jesuita.
Día dos
“Enséñanos a llevar buena cuenta de nuestros años para que adquiramos un corazón sensato” Salmo 90,12
Existe una obra de
teatro llamada Nuestro Pueblo, donde
una joven llamada Emilia muere dando a luz a su primer hijo. La actriz se ubica
en un lado del escenario en el mundo de la muerte; en el otro, en el mundo de
la vida, ya ha sido el funeral y están llevando a Emilia al cementerio.
Luego Emilia se da
cuenta de que es posible volver a vivir un día de su vida. Pero todos los
muertos le aconsejan que no lo haga. Emilia ignora los consejos y elige volver
a vivir el día más feliz de su vida: su cumpleaños número 12. Todo empieza bien,
pero antes de que sea la mitad del día, grita: ¡No puedo, no puedo seguir, se
va tan rápido! No tenemos tiempo de vivir otro momento, llévame de vuelta a mi
tumba, pide Emilia. Luego, con el corazón roto, pregunta a uno de los muertos:
¿Los humanos se dan cuenta de la vida mientras la viven, cada minuto?
El muerto se queda
en silencio y responde tristemente:
No, quizás lo hacen
los santos y los poetas.
¿Tiendes a llevar
tu vida de una manera apresurada, olvidándote de detenerte y disfrutar cada
minuto? Habla con Dios sobre cómo puedes detener esto.
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Referencia bibliográfica: Desafío. P. Mark Link, jesuita. Ejercicios Espirituales de San Ignacio
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