SAN ALBERTO HURTADO, S.J. |
Señor,
Ayúdame a decir la verdad delante de los fuertes. Y a no decir mentiras para ganarme el aplauso de los débiles.
Si me das fortuna, no me quites la felicidad.
Si me das fuerza, no me quites la razón.
Si me das éxito, no me quites la humildad.
Si me da humildad, no me quites la dignidad.
Enséñame a querer a la gente como a mi mismo y a juzgarme a mí como a los demás.
No me dejes caer en el orgullo si triunfo.
Ni en la desesperación si fracaso.
Más bien, recuérdame que el fracaso es la experiencia que precede al triunfo.
Enséñame que perdonar es lo más grande del fuerte y la venganza es la señal primitiva del débil.
Si me quitas el éxito, déjame la fuerza para triunfar del fracaso.
Si yo faltara a la gente, dame valor para disculparme.
Si la gente falta conmigo, dame valor para perdonar.
Señor, si yo me olvido de Ti, Tú no te olvides de mí.
San Alberto Hurtado, S.J.
...
Amen
ResponderEliminarAmén
ResponderEliminar